Alemania detiene a un hombre acusado de exportar ilegalmente componentes electrónicos para drones a Rusia

Jun 18, 2023

Un ciudadano alemán-ruso ha sido arrestado en Alemania acusado de violar varias veces la ley de comercio exterior del país al exportar componentes electrónicos a una empresa en Rusia involucrada en la producción de material y accesorios militares, dijo el martes la fiscalía federal de Alemania.

El sospechoso, que sólo fue identificado como Waldemar W. de acuerdo con las normas de privacidad de Alemania, fue arrestado en marzo. Sin embargo, el lunes la orden de detención dictada entonces por un tribunal local de la ciudad de Mannheim fue sustituida por una orden de detención emitida por un juez de instrucción del Tribunal Supremo Federal del país.

Según la fiscalía federal, W. era director general de dos empresas que fundó en el estado de Sarre, en el oeste de Alemania, para el comercio internacional de componentes electrónicos.

En el periodo comprendido entre enero de 2020 y marzo de 2023, exportó componentes electrónicos en 26 ocasiones a una empresa en Rusia cuya producción incluía el dron “Orlan 10” actualmente utilizado por las fuerzas armadas rusas en su guerra contra Ucrania.

Los componentes del tipo suministrado por el sospechoso son un componente común de este tipo de drones y están cubiertos por el Reglamento de Embargo de Rusia de la Unión Europea, dijo la fiscalía en una declaración escrita.

Para eludir las sanciones de la UE, W. generalmente primero importaba los productos en cuestión del extranjero a Alemania y luego los exportaba a Rusia, en parte a través de una empresa que controlaba en el estado de Baden-Wurtemberg, en el suroeste de Alemania.

Las exportaciones se realizaron inicialmente a dos empresas ficticias civiles con sede en Rusia. Estas empresas, en consulta con W., se aseguraron de que la mercancía fuera enviada al fabricante militar. Tras el inicio de la guerra en Ucrania en febrero de 2022, el sospechoso pasó a transportar la mercancía a Rusia a través de Dubái y Lituania, entre otros lugares, con la ayuda de supuestos destinatarios en terceros países.

El valor total de los componentes exportados ilegalmente asciende a unos 715.000 euros (773.000 dólares).